- Tiene cosas mal hechas pero lo importante es la sensación final que transmite.
Lo peor quizás esté en algunas situaciones que suceden sin explicación. Cobrando protagonismo personajes poco definidos que aparecen casi de la nada y que, del mismo modo, luego no se vuelven a ver.
El toque ecchi varía en cada episodio aunque en esta serie no es parte del argumento sino una especie de fan-service sutil y toque humorístico.Lo primero que choca de este anime juvenil es que tiene una estructura algo inconexa. Cuesta seguir al principio. Son doce episodios. Cada episodio dividido en dos partes distintas; basadas libremente en capítulos del manga original.
Siguen un orden cronológico, pero cada parte puede tener meses de diferencia.
Este anime se puede meter dentro de la categoría "harem" aunque no es un anime erótico. La tensión-sexual-no-resuelta es más bien tensión a secas.
Y todo sucede siempre de un modo bastante casual, con actitudes diferentes del personaje protagonista hacia las chicas.
Y de éstas hacia éste. Que no se qué las da.
La historia gira en torno a Junpei Manaka, un chaval de entre 15 (Ichi go / Ichigo = Fresa) / 17 años que quiere hacer cine y decide continuar sus estudios en una escuela con club de cine para hacer películas.
Entre tanto hay una "típica" historia de chico conoce chica... y luego a otra y a otra... Y no se decide por ninguna. Y es que es difícil encontrar una sola chica que sea estimulante, atractiva, confidente, enérgica y atrevida al mismo tiempo, aunque sí distintas chicas con un encanto particular cada una.Podría llamarse "Poligamia 100%" y en ese aspecto la trama está bastante bien llevada.
En general le doy un aprobado (un seis), bien o suficiente alto, porque no ha sido aburrida, ni me ha dejado indiferente.
La canción del ending, Ike Ike esta muy bien; muy discotequera. Ya la había escuchado antes. Aunque no sabía que pertenecía a esta serie.
